El león tonto y el conejo inteligente

Este cuento se llama El león tonto y el conejo inteligente, una fabula moral de Panchatantra, originalmente escrito en sánscrito. Esta es una grabación de LibraryCall. Hace mucho tiempo, había una selva en la antigua India llena de hermosas plantas y árboles, flores y frutas. Muchos animales vivían felices allí. Había ciervos, monos, conejos y jabalíes en esta selva. También había un león feroz que había protegido a los animales en el pasado. Pero a lo largo de los años, el león se había vuelto codicioso y cruel, atacando a los otros animales, incluso cuando no tenía hambre. Los animales de la selva ahora estaban muy asustados. Juntos, se acercaron al león y le dijeron: "Todopoderoso, ha estado matando a todos los animales del bosque y le rogamos que se detenga". El león se rió y dijo: "Pobres criaturas. Soy el rey de la selva y puedo hacer lo que yo quiera. ¿Por qué debería detenerme?" Los animales le dijeron, "Sabemos que usted es el rey y que podría matar a todos los que quiera, pero si sigue haciendo esto, pronto estaremos todos muertos". El león se rió de nuevo y dijo: "¿Por qué debería preocuparme por todos ustedes? Los mataré si lo deseo". "Pero Querido León", dijeron los animales tímidamente, "Si nos mata a todos, pronto no quedará comida, y entonces, ¿qué comerá? Tendrá hambre como nosotros. En lugar de eso, le traeremos comida". El león se dio cuenta de que lo que decían era cierto. Les preguntó cuál era su plan. "Todos los días le traemos un animal para comer. De esa manera no tendrá hambre y la selva seguirá llena de animales". "Hmm", pensó el león. Vio la sabiduría del plan, por lo que aceptó. Y por un tiempo, todo volvió a estar en calma en la selva. Los animales empezaron a divertirse de nuevo. Los ciervos podían pastar en paz, los monos se balanceaban felices en los árboles y las lagartijas y serpientes yacían al sol disfrutando del calor. Pero cada día, un animal desafortunado era elegido para ser devorado por el león. Un día, fue el turno de un conejito para ser comido. Ahora, como puedes imaginar, al conejito no le gustó nada esto, pero el conejito sabía que el león debía comer y esta era la única forma de proteger a todos los animales de la selva. Así que salió a la guarida del león. El conejito se tomó su tiempo. Se detuvo a oler las flores, jugó con unos monitos, y comió fruta deliciosa. Vio un pozo y se detuvo para tomar un trago. Cuando el conejito miró hacia el pozo profundo, ¡tuvo una idea! Mientras continuaba lentamente hacia la guarida del león, pensó en su plan. Debido a que el conejito había tardado tanto en llegar a su guarida, el león se había vuelto hambriento y estaba muy enojado. "¿Cuál es el significado de esto?", rugió el león. "¿Por qué llegas tan tarde? ¡Un pequeño conejito como tú no será suficiente para llenar mi estómago!" El fuerte rugido del león aterrorizó al conejito, pero valientemente miró hacia arriba y dijo: "Oh León Poderoso, siento mucho haber llegado tan tarde, pero permítame contarle lo que pasó". "Dime", dijo el león. "Y luego voy a comer a tantos de tus amigos como quiera. Estoy muy enojado". "Querido León", dijo el conejito. "Los animales en la selva saben cuán grande es su apetito, así que en realidad enviaron seis conejos hoy. De camino a su guarida, fuimos atacados por otro león más grande y más fuerte". "¡¿Qué?!" rugió el león. "¿Hay otro león en la selva que se esté comiendo a mis animales?" "Ah, sí", dijo el conejito dócilmente. "Le dijimos que éramos la cena de usted, pero a él no le importó. Después de eso, se comió a mis cinco compañeros. Me dejó ir porque estoy muy flaco, y me dijo que te trajera un mensaje". El conejito se detuvo, temblando de miedo. "Bueno, ¿cuál es el mensaje? Date prisa y cuéntamelo". "Ese león dijo que era el nuevo rey de la selva, y que debería irse de aquí de inmediato". El león estaba junto a él con ira y dijo, "Llévame a este otro león. Le mostraré quién es el verdadero rey". El conejito rápidamente llevó al león al pozo profundo con sus aguas tranquilas. Señalando hacia adentro, el conejito dijo: "Querido León, el nuevo león vive en este agujero". El león metió la cabeza en el pozo y rugió con fuerza. Inmediatamente escuchó al otro león rugirle. Por supuesto, era solo el eco de su propia voz, pero el león no se dio cuenta de esto. Ahora sintiéndose más enojado, rugió de nuevo. Escuchó el eco de su rugido otra vez. El león ahora estaba tan enojado que saltó al pozo para atacar y cayó al pozo profundo. Y eso, amigos míos, fue el final del malvado león. Una vez que los otros animales escucharon la historia del conejito, se pusieron muy felices. Y a partir de ese día, los animales vivieron en paz en la selva y prosperaron una vez más. Este cuento fue El león tonto y el conejo inteligente, una fabula moral de Panchatantra, originalmente escrito en sánscrito. Esta fue una grabación de LibraryCall.