El Tesoro Enterrado
Audio Type:
story
Language:
Transliterated Title:
El Tesoro Enterrado
English Title:
The Buried Treasure
Audio File:
Duration:
3:58
Transcript:
Hoy vas a escuchar la fábula El Tesoro Enterrado. Esta ha sido adaptada y narrada por Dania Pena.
Hace mucho tiempo hubo un hombre al que le importaba mucho el dinero. No siempre había sido rico. Siempre recordaba de cuando era niño y como había tenido que trabajar muy duro para ganarse cada centavo.
Trabajo de pastor.
Fue ayudante en una granja.
Y también administro la granja de un hombre rico.
Y donde fuera que trabajara, siempre ahorraba lo que podía. Finalmente, había podido ahorrar dinero suficiente para comprar su propia granja.
Gracias a su experiencia, la administro muy bien. Vendía los vegetales de su huerta y lo que cosechaba de sus cultivos. El hombre siendo muy ingenioso, también vendía los huevos de sus gallinas, la leche de sus vacas y la lana de sus ovejas.
Siguió ahorrando, día tras día, mes tras mes. Hasta que ahorro lo suficiente para llenar un cofre con monedas de oro. Se sentía muy complacido de tener ese tesoro, pero también tenía miedo.
- No todas las personas trabajan igual de duro que yo. Hay gente que roba. ¿Que si un ladrón viene a robar mi tesoro? ¡No puedo permitir que eso suceda!- pensaba muy preocupado.
- ¡Ya se! Voy a cavar un hoyo en un rincón de mi huerta, ahí podre esconder mi Tesoro bajo la tierra y nadie sabrá que ahí esta.- planeo sintiendo seguridad de que así solo él sabrá que tiene un tesoro enterrado en su jardín.
El hombre no tenía planeado gastar este dinero, pues no le hacía falta: su granja le daba lo suficiente para llevar la vida que deseaba.
De vez en cuando iba a aquel rincón de su huerta y desenterraba el Tesoro, Sacaba el cofre y le limpiaba la tierra de encima. Luego abría el candado, desataba la tela en la que estaban envueltas las monedas de oro y hundía sus manos en ellas. Ya satisfecho de verlas y jugar con ellas, hacia un nudo en la tela, cerraba el cofre con el candado, ponía el cofre en el hoyo y lo enterraba de nuevo.
Un día, cuando fue a admirar su Tesoro, descubrió algo terrible; alguien lo había desenterrado.
- Que ha pasado?! ¡No está mi cofre! No hay más que un agujero!- dijo el hombre aterrado
El hombre les platico a sus amigos lo sucedido.
-No sé qué hacer- dijo. Todo lo que he trabajado ha desapareció. Estoy en la ruina. Me siento tan desdichado. - lamento
Uno de sus amigos pregunto: ¿Que ibas a hacer con tu tesoro, tenías grandes planes para gastarlo?
-No, Solo quería que permaneciera allí- suspiro el hombre. – me gustaba admirarlo de vez en cuando.
Su amigo sonrió y contesto
-Bueno, ahora puedes admirar el agujero= dijo- te es igual de útil.
Al hombre no le quedo mas que reflexionar en lo que su amigo le comento,
Este cuento nos recuerda de que no tiene sentido dedicarse a acumular cosas si no se sabe disfrutar de ellas.
Esperamos que hayas disfrutado de este cuento. Márcanos nuevamente la próxima semana para escuchar una nueva y excitante narración.